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Pastillas y jeringas de insulina para tratar diabetes

¿Qué es la diabetes? Tipos, causas y tratamientos

Ante un mal día, nada más efectivo que un pan dulce o un chocolate. No obstante, ¿cómo están tus niveles de azúcar? La diabetes es una de las enfermedades crónico degenerativas más frecuentes en el mundo; se estima que para el 2045, 700 millones de personas vivirán con ella. Pero su diagnóstico puede tardar años, y lo más complejo, es prevenible.

La diabetes, también llamada diabetes sacarina o diabetes mellitus, es una enfermedad donde el nivel de glucosa en sangre es demasiado elevado, debido a que el cuerpo tiene una producción baja de insulina: una hormona que genera el páncreas y que sirve para que la glucosa de los alimentos ingrese a las células transformándose en energía.

Si al paso de los años, no se lleva un control de la enfermedad, el exceso de azúcar en la sangre puede causar problemas de salud tales como daños visuales, úlceras e infecciones, dificultad para controlar la presión arterial, daños en nervios entre otras.

¿Cuántos tipos de diabetes existen?

Existen tres tipos principales de diabetes: diabetes tipo 1 , diabetes tipo 2 y diabetes gestacional. Aunque parece que se trata de lo mismo, cada uno tiene una causa diferente.

Diabetes tipo 1

Es el tipo menos frecuente. Aproximadamente entre 5% a 10% de las personas que viven con diabetes la desarrollan. Su origen se encuentra en una reacción autoinmunitaria, es decir, el cuerpo se ataca a sí mismo por equivocación impidiendo la producción de insulina. 

Diabetes tipo 2

Comprende 90% a 95% de todos los casos de diabetes. En esta afección el organismo es incapaz de emplear la insulina de forma correcta. A diferencia de la diabetes tipo 1 que puede evolucionar en cuestión de semanas, en la diabetes tipo 2 transcurren años antes de un diagnóstico. 

Diabetes gestacional 

Es un tipo de diabetes que se presenta durante el embarazo. Posterior a él, los valores de glucosa en la sangre vuelven a su normalidad siempre que la madre mantenga durante la gestación un estilo de vida saludable: comer alimentos sanos , hacer ejercicio y asistir a sus visitas al médico. 

Resistencia a la insulina 

Esta afección sucede cuando las células de los músculos, grasa e hígado tienen una mala respuesta a la insulina; no hay una fácil absorción de la glucosa de la sangre por parte de las células. Lo anterior induce al páncreas a producir más hormona para mantener los niveles de azúcar estables. 

Si bien tener prediabetes te hace más vulnerable a desarrollar diabetes tipo 2, no quiere decir que no puedas retrasar o prevenir dicho escenario. En realidad es posible cambiando el estilo de vida; ejemplo, hacer actividad física con regularidad o siguiendo un plan alimenticio bajo en calorías. 

Niveles de azúcar en sangre: ¿cómo se miden? 

Para averiguar si tienes diabetes o prediabetes es necesario que conozcas cuáles son los parámetros entre azúcar  “normal” y “alta”. Existen dos alternativas:

1- Prueba de glucosa plasmática en ayunas. Es una muestra de sangre que se toma por la mañana, después de ocho horas de ayuno. Se realiza en laboratorio o con un glucómetro. Los resultados se proporcionan en mg/dL (miligramos por decilitro). 

  • Normal: 99 mg/dL o inferior
  • Prediabetes: 100 a 125 mg/dL
  • Diabetes: 126 mg/dL hacia arriba 

2- Prueba de hemoglobina glucosilada (A1C). Revela el nivel promedio de glucosa sanguínea por un período de tres meses. Para conseguirlo mide el porcentaje de azúcar unida a la hemoglobina — proteína portadora de oxígeno en los glóbulos rojos—. 

  • Normal: por debajo de 5,7%
  • Prediabetes: entre 5,7% y 6, 4%
  • Diabetes: 6,5% o más alto

En lo que concierne al análisis A1C hay condiciones que llegan a alterar los valores como el embarazo o que se tenga un tipo poco común de hemoglobina, indica el Instituto Médico Mayo Clinic.

¿Cuáles son las causas de la diabetes?

El origen exacto se desconoce, sin embargo, se cree que la combinación de factores genéticos y ambientales tienen un papel decisivo en el desarrollo de la enfermedad. Algunos son controlables, pero otros no.

Factores de riesgo diabetes tipo 1

  • Medio ambiente. Exposición a enfermedades virales. 
  • Presencia de células del sistema inmunitario, llamadas autoanticuerpos. Se encargan de destruir directamente las células que contienen determinada sustancia o ayudan a los glóbulos blancos a que lo hagan. 
  • Antecedentes familiares y ubicación geográfica. Es más frecuente en países como Finlandia o Suecia. 

Factores de riesgo para diabetes tipo 2 y prediabetes

  • Sobrepeso. Entre más tejido graso tengas mayor será la resistencia de las células a la insulina. 
  • Vida sedentaria. Al moverte con mayor frecuencia, además de mantener el peso a raya, la glucosa se utiliza a manera de energía. 
  • Niveles anormales de colesterol y triglicéridos. Un bajo porcentaje de lipoproteínas de alta densidad (colesterol “bueno”), aumenta el riesgo de diabetes. Lo mismo sucede con los triglicéridos, una grasa transportada por la sangre. 
  • Síndrome de ovario poliquístico. Este trastorno que se caracteriza por menstruaciones irregulares, obesidad o el crecimiento excesivo de vello puede causar en el cuerpo una resistencia a la insulina. 
  • Edad. Es cierto que entre más grande, la actividad física disminuye por consiguiente hay menos masa muscular y una mayor cantidad de grasa. Aunque en los últimos años el número de niños y adolescentes con diabetes ha crecido. 
  • Antecedentes familiares. El riesgo se incrementa si familiares directos (padres o hermanos) tienen el padecimiento. También si se es de origen hispano, indígena estadounidense o asiático. 

Factores de riesgo para diabetes gestacional

  • Edad. Superas los 25 años. 
  • Antecedentes familiares o personales. Tienes prediabetes o en embarazos anteriores has experimentado diabetes gestacional. Además si has dado a luz a un bebé de gran tamaño o sin vida, y no se determinó la razón de su defunción.
  • Sobrepeso durante la gestación
  • Raza. Las mujeres de ascendencia afroamericana, hispana o asiática son más vulnerables. 

No se sabe el por qué pero hay individuos que no sufren de diabetes aún cuando cumplen con varios de los factores de riesgo. 

 ¿Cuáles son los síntomas de la diabetes? 

Es posible tener diabetes y no experimentar síntomas al inicio de la enfermedad, en específico en el tipo 2. Sin embargo, en la mayoría de los casos los individuos perciben: 

  • Micciones frecuentes
  • Visión borrosa
  • Fatiga
  • Irritabilidad
  • Heridas que tardan en cicatrizar
  • Infecciones frecuentes en encías, piel o vaginales en las mujeres
  • Pérdida de peso sin hacer dieta o cambio en la alimentación 
  • Mucha hambre 
  • Aumento de la sed
  • Ganas de orinar con más frecuencia
  • Presencia de cetonas en la orina (un subproducto de la descomposición de músculos y grasa por falta o falla de la insulina)

¿Qué pasa si no se controla la diabetes?

Una diabetes mal cuidada podría acarrear complicaciones en ojos, riñones, nervios, corazón y vasos sanguíneos. Algunos de estos daños llegan a ser irreversibles e incluso mortales. De acuerdo a la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, muestra es lo siguiente: 

  1. Dificultad para ver, principalmente de noche. La luz solar comienza a molestar. Ceguera. 
  2. Desarrollo de infecciones o úlceras, en especial en dedos, pies y piernas. Además de ocasionar dolor, comezón y exudación en el área afectada, se puede presentar la necesidad de amputación. 
  3. Dificultad para controlar el colesterol y la presión arterial. El paciente con diabetes se vuelve vulnerable a sufrir una ataque cardíaco o accidente cerebrovascular. 
  4. Daño en nervios. Se traduce en dolor, ardor, hormigueo y pérdida de sensibilidad. Algunos hombres enfrentan complicaciones para alcanzar una erección. 
  5. El funcionamiento de los riñones empieza a fallar. Lo que lleva a diálisis o trasplante de riñón. 
  6. El sistema inmunitario se debilita. El cuerpo se vuelve incapaz de defenderse ante agentes invasores (virus o bacterias). 
  7. Los periodos menstruales se vuelven irregulares. Además a la mujer le cuesta más trabajo concebir. 
  8. Mayor riesgo de demencia y depresión. 
  9. Estreñimiento 
  10. Riesgo de desarrollar enfermedades óseas.

¿La diabetes se cura? 

No, aunque la diabetes sí puede entrar en remisión. Proceso en el cual el paciente no enfrenta ningún síntoma. Sin embargo, la enfermedad sigue presente y la posibilidad de recaída. De ahí la importancia de mantener un control y tratamiento, describe la Kaiser Foundation Health Plan.

¿Cuál es el mejor tratamiento para la diabetes?

La opción elegida por el médico dependerá de tres factores: el tipo de diabetes, comodidad del paciente y estilo de vida.

Tratamiento para la diabetes tipo 1 y tipo 2

Insulina

El organismo ya no produce esta hormona por consiguiente es necesario que ingrese de forma externa. Existen diversos tipos de insulina: corta acción, acción rápida y acción prolongada. Dependiendo de la necesidad de cada persona con diabetes —y la prescripción de su médico— se pueden combinar para su uso durante día y noche. 

El problema con la insulina es que su administración es únicamente a través de jeringa o pluma (aparato que parece lapicero). Una alternativa oral es difícil porque las enzimas del estómago obstaculizan su acción. 

Hoy en día existe un dispositivo llamado “bomba de insulina”. Se coloca en la parte externa del cuerpo, del tamaño de un teléfono celular, va liberando dosis de insulina por medio de una sonda que se conecta a un catéter que va debajo de la piel del abdomen. También hay bombas que funcionan de forma inalámbrica. 

Medicamentos

Algunos tienen por finalidad estimular la producción y liberación de insulina del páncreas; por otra parte, hay medicamentos que inhiben la producción y desprendimiento de glucosa por parte del hígado , lo que se traduce en una necesidad menor de insulina. 

Están los que actúan bloqueando la acción del estómago o enzimas intestinales encargadas en descomponer los carbohidratos. O bien, hacen que los tejidos se encuentren más sensibles a la insulina. 

El primer medicamento que se receta para tratar la diabetes tipo 2 es la metformina. Denominado biguanida, ayuda a controlar la cantidad de azúcar en la sangre.

Trasplante

Se debe pensar en él cuando ya hay una falla total de los riñones. No obstante, debes saber que no siempre es un procedimiento con éxito y atañe riesgos. Se necesita de medicamentos inmunosupresores el resto de la vida para evitar el rechazo del órgano, los cuales llegan a tener efectos secundarios graves. 

Tratamiento para la diabetes gestacional

Es crucial, para la salud del bebé y de la madre, mantener los niveles de azúcar en sangre bajo control. Y la razón es que el aumento de esta cifra puede llevar a que el pequeño libere niveles altos de insulina, el cual baja abruptamente inmediatamente después del nacimiento. 

En algunos casos se recomienda un tratamiento ya sea de insulina o de medicación oral. 

¿Cómo se puede prevenir o retrasar la aparición de diabetes?

Existen dos fundamentos indispensables para prevenir y controlar cualquier tipo de diabetes o prediabetes —incluso los tratamientos son inútiles sin ellos—. De acuerdo al Instituto Médico Mayo Clinic 7 son: 

Alimentación

No se trata de una dieta específica, más bien es de mantener un plan alimenticio balanceado: fruta, verduras, proteínas magras, granos integrales y menos grasas saturadas, hidratos refinados y dulces. 

Actividad física

El movimiento regular disminuye el nivel de glucosa en la sangre, incluso hace que el cuerpo sea más susceptible a la insulina. No tienes que pasar horas en el gimnasio, es suficiente con realizar 30 minutos de ejercicio aeróbico al día, y este período lo puedes dividir en bloques de 10 minutos a lo largo del día. 

Es importante que ante el diagnóstico de diabetes cuentes con el apoyo de tu familia, hagas cambios en el estilo de vida y en especial. ¡No dejes de acudir al médico!

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